La confianza

La confianza es una de las piedras angulares para que una relación BDSM tenga éxito. Si existe confianza, a pesar de cualquier cosa que pueda suceder, las emociones, el cuerpo, e incluso el alma permanecerán a salvo de las consecuencias. La confianza es lo que permite que dejemos nuestra vida en manos de la otra persona, cedamos el control de forma segura y feliz. La confianza nos permite experimentar un mundo inimaginable y gozar de la fuerza y la calma que esto proporciona. Es, probablemente, una de las emociones más fuertes que podemos experimentar o dar.

La confianza nace de la creencia en uno mismo y en el otro. Nosotros basamos la confianza en el conocimiento y el sistema de valores que tenemos, y a través de ella tomamos las decisiones que nos parecen más acertadas.
Aprendemos a confiar porque queremos ser mejores de lo que somos, porque queremos aprender y crecer dentro de la relación. La confianza nos permite sentirnos cómplices y amantes, nos conduce al respeto y a creer en lo que el otro dice y hace. La confianza y el respeto generalmente van de la mano, es algo que se gana, no se puede pedir ni exigir. Debemos recordar que uno debe confiar en sí mismo, para poder esperar que los demás confíen en nosotros.

La confianza en el mundo de BDSM es radicalmente diferente que en cualquier otra faceta de la vida. En un contexto convencional, la confianza en el otro, implica que la otra persona no nos dañará emocionalmente, que nos será fiel, y siempre nos respetará. El traicionar esa confianza, es algo sumamente doloroso y generalmente conlleva un cambio profundo en la relación e incluso el fin de la misma. En el estilo de vida BDSM, la confianza en el otro, representa un compromiso mucho más fuerte y profundo, y la quiebra de esa confianza puede tener resultados imprevisibles. En una relación convencional, hay un compromiso, pero también hay generalmente, una "reserva emocional" de algún tipo. En el estilo de vida BDSM , el compromiso es más profundo e intenso, y raramente existe ninguna clase de reserva emocional que pueda salvar la situación si la confianza se rompe, ya que el mundo BDSM implica también la confianza física. En un contexto convencional, cuando un esposo pretende estrangular a su pareja es considerado un abusador y encarcelado, mientras que un Dominante puede gozar con esta práctica y su sumiso confiar plenamente en él; si un esposo convencional, amenaza con un cuchillo a su pareja, puede que el resultado sea mortal, sin embargo cuando lo hace un Dominante con su sumiso se trata de un juego, basado en la confianza y el consentimiento mutuos . Esto representa una confianza más allá de cualquier duda y es el regalo más grande que un sumiso puede hacer a su AMO.

Es fácilmente deducible pues, por qué la traición de esta confianza en el mundo BDSM, es algo grave y potencialmente devastador. La confianza en el otro debe ser absoluta y sin reservas. Generalmente esta confianza ciega está justificada y se deposita en la persona adecuada, y si en algún momento esa persona falla, recuperar la confianza es difícil, pero no imposible, siempre que exista compasión, cuidado y preocupación por una parte y comprensión y aprendizaje por otra, para que no vuelva a suceder nunca más.

La confianza en el otro, es una experiencia profundamente personal, que depositada en la persona adecuada, puede enriquecer y ser una de las experiencias más satisfactorias de nuestra vida.
La confianza es algo que nace y vive en el corazón y traicionarla es algo demasiado profundo como para jugar con ella.


"Lo que me preocupa no es que me hayas mentido,
sino que, de ahora en adelante,
ya no podré creer en ti."
F.W. Nietzsche

A.S
Autora: adnil
Fuente: Un Rincón del Paraíso

El respeto

Podemos definir respeto como estima, como valoración o excelencia de una persona; una calidad o habilidad personal. La deferencia a la posición o consideración de alguien. Aceptación o cortesía apropiadas.
El respeto, es un privilegio dado a una persona por otra. Una consideración de uno hacia otro, la manera en que uno se dirige a otro en público y en privado. Los que tienen el respeto de otros, deben considerarse a sí mismos afortunados; deben sentirse honrados de que se les haya concedido tal privilegio. El respeto es uno de los cumplidos más grandes que cualquiera puede hacer a otro. El presuponerse digno de respeto, sin embargo, es algo patético.
El respeto se gana, no se tiene porque sí. Es una calidad personal adquirida, una calidad que todos los Dominantes y sumisos, deben esforzarse en adquirir. La habilidad de comportarse de manera apropiada, cortés e inteligente en todas las situaciones no es una tarea fácil, requiere compromiso, comprensión, tolerancia, integridad, honestidad, y muchas otras cualidades personales importantes, cualidades personales que la mayoría de nosotros tenemos, pero que no todos estamos dispuestos a esforzarnos por mantenerlas.
Algunos piensan que porque llevamos un tipo de zapatilla, correremos como un atleta; de la misma forma, algunos creen que porque alguien se haga llamar AMO, ya han de tener el respeto de la gente, de los Dominantes y de los sumisos en el estilo de vida BDSM.
He visto, en mis visitas a los canales de BDSM, un error muy común que cometen algunos Dominantes; el de asumir que merecen el respeto de los demás, sólo porque su Nick indica que son Dominantes. Consideran el respeto como un derecho, simplemente porque tienen la consideración de AMO; incluso demandan ese respeto en el canal, hablan a un sumiso como si ellos tuvieran permiso para tomar el control sobre él, ordenan...y siempre me sorprendo cuando alguien dice inmediatamente: "Señor".
Nunca he esperado tener el respeto de la gente porque sí. He trabajado duro para ganarme el respeto de mis iguales, y una vez que lo he ganado, continúo trabajando para conservarlo.
Creo que el respeto que mostramos para con otros, es un requisito previo para ganar el respeto de los demás. Si somos incapaces de entender el concepto de respeto, no podemos entender posiblemente la manera en que debemos actuar para ganarlo. Creo que debemos proteger el respeto que ofrecemos a los demás, debemos sólo mostrar respeto a aquellas personas que lo merecen. El respeto es algo que se muestra en muchos aspectos de nuestra vida, en el el trabajo, en casa, con los amigos... En la vida diaria hay gente que se gana y merecen nuestro respeto
El respeto es un privilegio que hay que valorar ... Debemos exigir que el respeto que mostramos a otros, sea también valorado.
El respeto es un privilegio, no un derecho y por tanto no puede exigirse, debe ganarse.

"Es fácil temer, pero penoso;
respetar es difícil, pero más dulce."
J.W.von Goethe

A.S.
Autora: Adnil
Fuente: Un Rincón del Paraíso

Las reglas en la relación BDSM

Las reglas son algo interesante aunque, realmente, dentro del juego de D/S, no todo el mundo usa las mismas reglas. Cada pareja juega a su manera y yo creo que la única regla importante y que tod@s debemos usar es la que dice SANO,SEGURO Y CONSENSUADO. De todas maneras, no creo que esté mal conocer algunas reglas que se usan en BDSM y, a partir de ahí, desarrollar la que usemos en el juego.
La necesidad de obedecer a reglas es recurrente por mucha gente. Sin embargo, las reglas tienen tendencia a hacerse aburridas, ser un obstáculo o ambas cosas. No llevar ropa interior puede parecer una idea muy atractiva, pero muy rápidamente será muy poco práctica. Muchos Doms comienzan con el deseo escoger lo que su sub debe llevar. La realidad sin embargo es que apenas ninguna persona puede mantener esta postura durante mucho tiempo, simplemente porque no estará interesado en ello. Tener que pedir permiso para fumar es fantástico durante un fin de semana - después de dos semanas sólo se hará muy irritante a ambos.
Las reglas pueden ser motivo de diversión, pero de nuevo, pruebe que funcionan, y no solamente durante unos días, sino a largo plazo. De esto dependerá que la regla se convierta en algo poco práctico, aburrido o realmente divertido. Tómese su tiempo e intente averiguar si en realidad funciona como usted quiere. Si no lo hace, deseche la regla o ajústela a lo que quiera, entonces funcionará.
Como Dominante, tenga en cuenta esto. Las reglas voluntarias no funcionan y - muy rápidamente - comen por completo la confianza que su sub ha concedido en usted. Esto sólo es contraproducente. El poner una regla o una exigencia y después no hacer nada para supervisarla plantará la primera semilla de incertidumbre y desconfianza. No es lo que usted quiere. De hecho, si usted aclara que cada nueva "cosa" y cada nueva regla requieren una fase de prueba, las cosas serán mucho más claras.
Las reglas también tienden a bloquear el desarrollo, la creatividad y la exploración. Esto es cierto sobre todo en lo que se refiere a las exclusiones. Cueste lo que cueste, permita a su compañero sumiso mostrar sus ideas y experimente con ellas. Bastantes ideas no funcionaran, pero no es un problema. ¡Usted sólo aprenderá a andar si usted acepta que usted se caerá!

Artículo publicado en The Total Power Exchange Home Page
Traducción libre de Miss Jones
Fuente : www.clubrosas5.com

Conté mis años...

Conté mis años y descubrí que tengo menos tiempo para vivir de aquí en adelante que el que viví hasta ahora.
Me siento como aquel chico que ganó un paquete de golosinas: las primeras las comió con agrado, pero, cuando percibió que quedaban pocas, comenzó a saborearlas profundamente.
Ya no tengo tiempo para lidiar con mediocridades. No quiero estar en reuniones donde desfilan egos inflados.
No tolero a maniobreros y ventajeros. Me molestan los envidiosos que tratan de desacreditar a los más capaces para apropiarse de sus lugares, talentos y logros.
Ya no tengo tiempo para reuniones interminables donde se discuten estatutos, normas, procedimientos y reglamentos internos, sabiendo que no se va a lograr nada.
Ya no tengo tiempo para soportar absurdas personas que, a pesar de su edad cronológica, no han crecido.
Detesto, si soy testigo, de los defectos que genera la lucha por un majestuoso cargo. Las personas no discuten contenidos, no, apenas los títulos. Y mi tiempo es escaso como para discutir títulos.
Quiero la esencia, mi alma tiene prisa...
Sin muchas golosinas en el paquete, quiero vivir al lado de gente humana fuerte.
Que sepa reír de sus errores.
Que no se envanezca con sus triunfos.
Que no se considere electa antes de hora.
Que no huya de sus responsabilidades.
Que defienda la dignidad del hombre.
Y que desee tan sólo andar del lado de la verdad y la honradez.
Caminar junto a cosas y personas de verdad, disfrutando de un afecto absoluto y sin fraudes, nunca será pérdida de tiempo.
Lo esencial es lo que hace que la vida valga la pena.
Quiero rodearme de gente que sepa tocar el corazón de las personas.
Gente a quien los golpes duros de la vida, le enseñó a crecer con toques suaves en el alma
Sí… ¡tengo prisa! por vivir con la intensidad que solo la madurez puede dar.
Pretendo no desperdiciar parte alguna de las golosinas que me quedan.
Estoy seguro que serán más exquisitas que las que hasta ahora he comido.
Mi meta es llegar al final satisfecho y en paz con mis seres queridos y con mi conciencia.
Espero que la tuya sea la misma, porque de cualquier manera llegarás...

Mario de Andrade

(Poeta, novelista, ensayista y musicólogo brasileño)

Perra que aúlla tu nombre


Si me atas a tu mano
cíñeme el collar igual que un beso
sellado piel con piel
y haré de tu mirada mi mundo
con la fuerza de tus silencios encadenada.

Entonces bendeciré tus pies con mi boca,
para ser perra que aúlla tu nombre
más allá del juego,
en esta pasión que atrapa el alma.

Versos de perra negra de Pura Salceda.
Ed. Agapea, 2005

Menos mal

Hoy estuve, pero no estuve
se durmieron todas mis ganas.
Tanta lluvia en mi,
tan cansado
en medio de esta encrucijada.
Voy buscando, de nuevo tropecé
quedándome sin fe,
sin salida a lo que siento.
Y quise estallar
para olvidarme
de la parte que no entiendo.

Menos mal que por momentos,
en esta amnesia de vida,
menos mal que aparecías
con el sonido de tu risa.
Menos mal que me abrazabas
para luego yo besarte
menos mal que estás en mi...

Menos mal que está tu puerto
tu puerto para descansar.
Menos mal que tu me salvas
si me toca naufragar.
Menos mal que me besabas
para luego yo entregarme...
Menos mal que estas en mi,
menos mal que me encontraste.

Hoy estuve sin fuerzas para seguir
pequeño me sentí
sin agacharme siquiera
tan perdido que mis preguntas
no encontraban las respuestas.

Menos mal que por momentos,
en esta amnesia de vida,
menos mal que aparecías
con el sonido de tu risa.
Menos mal que me abrazabas
para luego yo besarte
menos mal que estás en mi...

Menos mal que está tu puerto
tu puerto para descansar.
Menos mal que tu me salvas
si me toca naufragar.
Menos mal que me besabas
para luego yo entregarme...
Menos mal que estas en mi,
menos mal que me encontraste.

Si estás conmigo,
aunque esté roto
me siento vivo
me siento vivo...


Video "Menos mal" de Manuel Carrasco


Menos mal que estás en mi
...menos mal que me encontraste.
Te adoro, mi Amo
kaya

Manual del Propietario

*Tú y tu mascota
La relación entre un propietario responsable y cariñoso y una mascota feliz, plena y fiel es profunda y duradera, y puede darles muchos años de placer y satisfacción tanto a la mascota como al propietario.
Si estás leyendo esto, probablemente tengas un profundo interés en ser propietario de una mascota. Puede ser que estés pensando en adoptar una, y desees saber cuales son los factores a considerar para elegir la que llene tus necesidades. Idealmente, el futuro propietario comienza su búsqueda con una mirada honesta a sus propias necesidades, y a su habilidad para proporcionarle los cuidados adecuados.
Por otra parte, a veces la vida te sorprende con una mascota - un regalo - para el cual no habías hecho planes ni te habías preparado. Puede que nunca se te hubiera ocurrido que te podría gustar tener una mascota. Tal vez conocías a alguien por mucho tiempo antes de darte cuenta de que tenía cualidades de mascota.
Tu mascota ha preparado este manual porque valora la relación única que compartimos. Espera que los pensamientos e ideas aquí mostradas comprensión e impulsen más discusión, exploración y placer.

*Confianza
Confianza es la base de cada relación entre Propietario y mascota y se experimenta en varios niveles.
-Confianza en cuidar la seguridad:
Primero y principal, tu mascota necesita confiar en que la vas a mantener a salvo de daños físicos o emocionales duraderos. Necesita confiar en tus intenciones: que la valúas y no deseas dañarla. Necesita confiar en tu competencia: que no la dañarás por descuido o ignorancia.
-Confianza en mantener la disciplina:
Junto con la confianza de que la mantendrás a salvo, tu mascota necesita confiar en que vas a asumir la responsabilidad por su disciplina e imponerla. En una relación de intercambio de poder – ya sea una relación de una hora o por toda la vida – el regalo que te ofrece tu mascota es entregarte el control y servirte. Tu regalo para ella es aceptar controlarla y así liberarla. Cualquier desliz en su cuidado, entrenamiento o disciplina es una forma de devaluarla a ella y a tu responsabilidad como Propietario. Tienes el derecho a esperar de ella un comportamiento adecuado y la correspondiente responsabilidad de resolver el comportamiento inadecuado.
-La confianza como una necesidad emocional:
La sumisión de tu mascota es impulsada por varias necesidades emocionales: La necesidad de gustar, la necesidad de servir, la necesidad de entregar el control. Pero tal vez no es tan obvia su necesidad de confiar. Tu mascota necesita confiar en alguien; lo prueba al entregar el control; tú le permites experimentar esa entrega y confianza en una forma muy concreta cuando le administras incomodidad física o psicológica; la guías a través de la experiencia sin dañarla; ella siente un profundo placer; has satisfecho su necesidad de confiar.
Y tal vez tú, como Propietario, tienes una la necesidad correspondiente de que confíen en ti, de tener alguien que crea en tu fuerza y en tu competencia, lo cual se satisface cuando tu mascota te da el control de su cuerpo y de su mente.

*Entrenando tu mascota
Una de las mayores suertes y recompensas por tener una mascota es la oportunidad de entrenarla a tu gusto. Con el entrenamiento adecuado, tu mascota puede aprender a complacerte con su vestuario, su habla, sus modales y sus favores sexuales. Podrás disfrutar prácticamente cualquier fantasía sexual.
El proceso de entrenamiento nutre a relación a muchos niveles. Cuando el Propietario acepta la responsabilidad de dar forma al cuidado, entrenamiento y disciplina de su mascota, muestra que respeta y valora su sumisión. Y como recompensa, se gana el respeto y gratitud de la mascota.
Entrenar a tu mascota es muchas veces divertido, y a menudo exigente. Por medio del entrenamiento, la dinámica de D/s puede pasar de un simple juego pre-sexo algo “pervertido” a un nivel psico-emocional más profundo y satisfactorio.

*Expectativas
Debes comunicarle claramente a tu mascota lo que esperas de su comportamiento. Ciertamente, querrás especificarle como debe dirigirse a ti (Señor, Amo, tu nombre de pila). ¿Debe mantener su mirada baja o fija en la tuya? ¿Mantenerse en cuatro patas si no se le dice lo contrario? ¿Debe obedecer las ordenes rápido y sin quejarse? ¿Debe pedir permiso antes de actuar?
Puedes querer repasar tus expectativas con tu mascota al comienzo de cada sesión. Esto puede convertirse en un ritual reconfortante y excitante para tí y tu mascota. Por ejemplo puedes hacer que tu mascota se arrodille a tus pies, sus ojos en los tuyos, mientras le dices claramente que esperas de ella, y se lo haces repetir. Además de permitir que se establezca un ambiente adecuado y permitirle a la mascota y al Propietario acomodarse a sus roles, este proceso asegura que la mascota no puede excusar cualquier mal comportamiento posterior con el argumento de que no sabía qué debía hacer.
Cuando tu mascota haya tenido tiempo de aprender lo que esperas de ella, puedes querer que te lo diga sin que tú lo recuerdes primero. Con un entrenamiento consistente, tu mascota internalizará y anticipará tus expectativas, aunque puedes querer mantener una revisión formal cada tanto.
Desde luego, como Propietario, es tu prerrogativa cambiar las reglas en cualquier momento. Puedes querer desafiar a tu mascota y presionar sobre sus límites, o sólo explorar nuevas interacciones que puedan interesarte.

*Límites
-Estableciendo límites
Establecer los límites es una actividad esencial y cooperativa entre tú y tu mascota. Para esta discusión tu mascota debe ser considerada como un igual, y tal vez es mejor realizarla fuera del ámbito del “juego”. Los “soft limits” (límites relativos) son esas actividades que las partes creen que, por lo menos por el momento, están fuera de consideración y no son negociables. Los “hard limits” (límites absolutos) son aquellos que, por el momento, están absolutamente fuera de consideración y no son negociables, y también los impuestos por la realidad por problemas médicos o similares.
Desde luego, los límites relativos y los absolutos pueden moverse y fluctuar durante el desarrollo de la negociación. Si bien la discusión de los límites muchas veces es desatendida por las partes, deberías asegurarte, como Propietario responsable, de que se haga una revisión periódica de los mismos.
-Presionando los límites absolutos
Una flagrante despreocupación o presión sobre los límites absolutos será considerada una traición seria a la confianza, y una posible causa para terminar la relación. Un Propietario confiable podía considerar presionar sobre estos límites, pero debería tener una razón concluyente para hacerlo, debería poder dar un consuelo profundo después del hecho, y debería estar disponible y preparado para enfrentar las consecuencias, como furia, pérdida de control y depresión.
-Presionando sobre los límites relativos
En contraste con establecer límites – un ejercicio entre iguales – y presionar sobre los límites absolutos - muy riesgoso y muchas veces imprudente - presionar sobre los límites relativos es un privilegio y responsabilidad del Propietario. Desafiar a tu mascota a actuar más allá de su zona de comodidad debería aumentar sus sentimientos de sumisión, y cuando tenga éxito, promoverá el crecimiento intelectual, emocional y psicológico de ambos.
Los límites se presionan incrementando el nivel o duración del dolor, incomodidad o restricciones a los que la mascota es sometida. La incomodidad y las restricciones pueden ser físicas, emocionales o una combinación de ambas.
Cuando presiones sobre los límites relativos, especialmente los límites emocionales o la humillación, debes ejercitar cuidado y precaución. Aún cuando tu mascota te sea bien conocida, sus reacciones pueden ser impredecibles, volátiles, y estar relacionada con problemas pasados que tú (y aún ella) no hayan advertido (abuso, asociaciones penosas, e inseguridades). Por otra parte, puede ser profundamente gratificante para ambos cuando puedes ayudarla a enfrentar esos límites, pasarlos y guiarla a salvo de vuelta al otro lado. Los sentimientos de sumisión y devoción de tu mascota se profundizarán, ella respetará tu fuerza y sentirá el orgullo del éxito. Y también aumentarán tus propios sentimientos de poder, cariño, respeto y responsabilidad hacia esa criatura que te ha honrado con su confianza.
-Controlar la resistencia al presionar los límites
Desde luego, a menudo encontrarás resistencia de tu mascota cuando intentes presionar sobre sus límites. Éste es un momento peligroso, y debes ser sensible, flexible, calmo y controlado en tu respuesta. Cómo debes responder dependerá de cuánto conozcas a tu mascota, y de por qué crees que se resiste. Si crees que sólo te está probando o siendo obstinada, tendrás que aplicar una corrección, como se discute más adelante.
Sin embargo, es más probable que tu mascota quiera complacerte, pero está simplemente abrumada por un miedo o confusión momentáneos. En tal caso, deberás ser sensible a la vulnerabilidad de tu mascota en esos momentos, y evitar las respuestas destructivas como el sarcasmo, tratar de usar la fuerza, alzar la voz o reprenderla. Respuestas tales como “pensé que querías complacerme” son injustas y desmoralizadoras para una mascota que quiere complacerte genuinamente, y que ya siente miedo o la sensación de fracaso.
La mascota cuyo Propietario la maltrata con palabras duras tiene derecho a tener dudas acerca de tu competencia, y preguntarse si se preocupa realmente por ella.

*Respuestas más constructivas a su resistencia podrían ser:
-Reconoce el miedo de tu mascota, exprésale tu confianza en ella y aliéntala a tratar (“se que estás asustada, mi amor... Creo que lo puedes hacer, ¿lo intentarías por mi?)
-Reduce ligeramente la dificultad o intensidad de la actividad deseada al comienzo (por ejemplo, puede orinar en la bañera en lugar de sobre papeles).
Recuérdale a tu mascota que siempre puede usar su palabra de seguridad para detener o interrumpir la actividad si las cosas se vuelven demasiado intensas.
-Dile que esperarás y tratarás nuevamente más adelante.
Decide abandonar el intento por ahora, y dile que has tomado esa decisión (“De acuerdo, no tienes que hacer esto por mi ahora”) Es importante que transmitas 1) fue tu decisión, no la de ella, y que 2) no estás enojado o desilusionado con ella.
El Propietario que puede controlar con éxito la resistencia de su mascota a presionar sobre los límites será recompensado con su gratitud, respeto y deseos de complacerlo aún más la próxima vez.
Dicho esto, un Propietario es sólo humano, y estos son momentos muy emotivos. Si encuentras que has respondido en forma injusta o con enojo, simplemente haz una interrupción, reconoce tu error y discúlpate. Lo probable es que, en tanto tu mascota sepa que la respetas y la quieres, te perdone casi cualquier cosa.

*Palabras de seguridad
Revisar las palabras de seguridad puede ser particularmente útil y liberador para el Propietario que se preocupa por su mascota cuando está presionando sobre los límites. Cuando él tiene confianza en que ella usará la palabra de seguridad si es necesario (y sólo cuando es necesario), puede sentirse libre de presionar a su mascota implacablemente, ignorando o aún divirtiéndose con sus ruegos, lágrimas o enojo. Desde luego, siempre estará atento para detener una actividad si sospecha que ella está en peligro pero demasiado “ida” para usar la palabra.
Tener la práctica de una palabra de seguridad es liberador también para la mascota, de dos maneras. Primero, el tener una “salida” la libera para complacerte explorando actividades que puedan significar un desafío. Sabe que te detendrás si el juego se vuelve demasiado intenso, y por lo tanto desea probar.
Hay otra manera más sutil en la que la palabra de seguridad libera a tu mascota. Ella sabe que no detendrás la actividad a menos que use la palabra. No necesita más vigilar o censurar sus reacciones por miedo a que detendrás la escena demasiado pronto. Y será libre de dar su respuesta natural y no controlada a una escena intensa.

*Disciplina
Entrenar a tu mascota requiere que la disciplines corrigiendo los comportamientos inapropiados y premiando los apropiados.
Las correcciones frecuentemente consisten en castigos físicos en la forma de dolor, pero también puede consistir en humillación, privación de privilegios, casi cualquier cosa que como Propietario puedas imaginar. A veces la corrección se aplica inmediatamente, otras veces será retrasada. Pero si tu mascota va a confiar real y profundamente que estás en control, necesita saber con absoluta certeza que hay consecuencias por el mal comportamiento.
Tu mascota puede probarte cuando duda de tu compromiso con su entrenamiento y disciplina. Aún una mascota normalmente obediente, bien educada, pero determinada y traviesa, puede probarte de tanto en tanto. Puede “olvidarse” de llamarte Señor. Puede rehusarse a obedecer una orden simple. Puede mirarte con una inocencia forzada o en abierto desafío. Puede volverse desvergonzada o poner los ojos en blanco.
Como respondas cuando te pruebe es crucial para el éxito y el progreso de la relación. Y, como siempre, tu respuesta debe ser genuina. Tu mascota te conoce y descubrirá cualquier intento de “actuar” severo o enojado y tu credibilidad y autoridad sufrirán. Simplemente necesita asegurarse de que el comportamiento no pasa desapercibido. Desde luego, harás todo lo posible por evitar una respuesta inmediata y desmedida dada con enojo, que puede fácilmente terminar en abuso.
Un Libro de faltas puede ser una herramienta invaluable para disciplinar a tu mascota, particularmente si te está probando o en cualquier situación en la que la corrección será diferida y no inmediata. Cuando tu mascota no responde apropiadamente, sólo necesitas sacar tu librito negro y anotar la falta para una futura corrección. Puedes querer tener un “código de correcciones” para varias trasgresiones; por ejemplo, no responder a un comando simple = x cantidad de azotes; no responder lo bastante rápido = algunos menos que x, y así en adelante. O quizás simplemente anotas las transgresiones y decides la corrección específica más adelante. Puede ser divertido para ti revisar el libro e imaginar escenarios de disciplina. Tu mascota notará que las anotaciones se suman, y se dará cuenta de que pronto enfrentará una noche realmente larga. Más importante, ella verá que estás prestando atención a su entrenamiento y disciplina, y que las elecciones que haga tendrán consecuencias muy reales.
Tu mascota necesita la seguridad en tu fuerza; saber que no puede salirse con la suya, que no puede manipularte, y que puede confiar en que la controlas. Sólo entonces podrá descansar en su sumisión, y sólo entonces serás realmente su dueño.

Elogios y retroalimentación serán tus más poderosas herramientas para entrenar a una mascota realmente sumisa y que está ansiosa por complacerte. Tus elogios deben ser genuinos, específicos, y desde luego, no condescendientes.
Al igual que con las correcciones, los elogios deben ser a veces inmediatos y a veces demorados: ambos son importantes para tu mascota.
Los elogios inmediatos normalmente se dan durante el juego, y serían algo así como “buena chica” cuando se porta bien o intenta vencer algún desafío; "perfecto, justo como me gusta" si la estás inspeccionando o respondiendo a sus atenciones; "lo estás haciendo bien", etc.
Aun cuando tu mascota disfruta de los elogios inmediatos durante una escena, también necesita de tu retroalimentación en los días que siguen. Hazle saber lo que te gustó, qué te sorprendió, y porqué te hizo feliz.
Tu mascota realmente crecerá cuando reconozcas su espíritu y su individualidad. Sobre todo, ella necesita saber que la quieres.

*El regalo
Cuando el Propietario y la mascota correcta se encuentran, han recibido uno de los regalos más raros y valiosos de la vida. Que tú y tu mascota disfruten y guarden como un tesoro vuestra extraordinaria buena suerte por muchos años.


Publicado por Ann en ecstagony.com el 31/08/05